A veces nos encontramos con espacios entrañables y con encanto, pero complicados a la hora de conseguir una distribución y optimización de espacio, pero un buen estudio de planificación puede conseguir sacar el máximo provecho de los rincones más insospechados.
Este es el caso de esta pequeña buhardilla del barrio de Malasaña en Madrid, un espacio lleno de encanto........y de rincones que parecía no eran útiles......pero de los que se consiguió aprovechar la máxima capacidad.
Un estudiado diseño, y el buen trabajo de fabricación y montaje de mi carpintero y amigo Pedro Vazquez, fueron las armas, para conseguir la máxima capacidad de armarios, sin alterar la estética de la buhardilla.
Para sacar una zona de comer, diseñé una sobre barra en el exterior de los muebles de cocina, para con unas banquetas resolver la zona de comida, sin ocupar el espacio de una mesa de comedor.
Jugando con las distintas alturas en el mobiliario a medida hemos creado y diferenciado las diferentes utilidades del conjunto en la zona de mobiliario de cocina, realizado en melanina blanca, y con encimera post formada de formica, un diseño sencillo y práctico, en color blanco para conseguir amplitud visual de espacio.
Con esta distribución conseguimos incluso sacar un espacio para mesa de trabajo o estudio, siguiendo la continuidad de la barra, y con diferente altura, se hizo una mesa a medida debajo de la ventana, para aprovechar la luz. ¿Qué os parece?
Aprovechamos la zona más baja de la buhardilla para realizar un mueble a medida, para la televisión. y con espacio libre para guardar cosas.
Para separar la zona de dormitorio, mi cristalero Jose, realizó según mis planos un tabique de cristal con puerta vaivén, de forma que conseguimos luz en todo el espacio de la buhardilla, y sacamos el máximo partido del espacio. Para tener intimidas, se colocó una cortina para poder cerrar y abrir.
Fotos de: Sebastian Palomo Danko. Instagram:@Palomodanko
Que tengáis FELIZ FIN DE SEMANA!!!
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